La primera celebración de egresos del 2022 fue una jornada marcada por la emotividad, sinergia y admiración a las y los jóvenes que completaron el Programa de Intermediación Laboral de Fundación Proyecto B.
Eran las seis de la tarde del jueves 21 de julio, el frío ya se hacía notar en la calle y el equipo de Fundación Proyecto B se reunía en las puertas de Fundación Colunga.
Adentro, empezamos a preparar la actividad que nos convocaba; el primer encuentro de egresados y egresadas del año y nuestro primer evento presencial con beneficiarios desde el inicio de la pandemia por COVID-19.
Poco a poco las personas comenzaron a llegar a la jornada que comenzó con un cóctel lleno de deliciosos pancitos, chocolate caliente y otros dulces para recibirles. Pero lo que sin duda destacó desde un inicio fueron los rostros de las y los jóvenes, quienes a medida que llegaban pasaban de una desorientación a un alivio notorio cuando encontraban a su respectiva asesora.
Cuando el ambiente se hizo más cómodo y habían entibiado el cuerpo con un café, comenzó la actividad de la mano del director ejecutivo de la Fundación, Julio Cifuentes, quien dio la bienvenida. Luego, todas y todos se reunieron en un gran círculo, y el director del programa, Omar Rivas, realizó una actividad que quebró totalmente el hielo. Con sus habilidades de coach logró que las personas se coordinaran, disfrutaran y formaran un solo equipo humano. Traspasamos la energía jugando con un ovillo de lana y así forjamos una conexión que inundó toda la sala.
Luego, una de nuestras asesoras, María José Espinosa, tomó la posta y nos sumergió en el valor de lo que estábamos celebrando. La psicóloga dedicó tiempo a cada una y uno de los jóvenes beneficiarios del programa para que en sus propias palabras compartieran como fue el proceso de inserción.
En ese momento la energía, que se sintió anteriormente, se concentró en cada persona que tomó la palabra. Los jóvenes, que en un inicio se veían explorando el espacio, ahora hablaron con más soltura y comodidad, como percibiendo que allí estaban en un lugar seguro.
“Esforzarse trae beneficios con el tiempo, vale la pena esforzarse, cambiar. Porque gracias a Proyecto B se generó un gran cambio en mi vida, ahora estoy independizado, empecé a vivir solo.”
Joven beneficiario de la fundación.
Retos, adversidades, superación, descubrimientos y una mezcla de emociones fueron los aspectos principales que guiaron cada relato. Admiración, atención y apreciación se reflejaron en los rostros de las y los oyentes que se empapaban de esas experiencias.
A través del Programa de Inserción Laboral, creado por Fundación Proyecto B, buscamos insertar laboralmente a jóvenes en contexto de vulnerabilidad del área de Justicia Juvenil y Protección de Derechos del Sename. En ese marco las y los jóvenes atraviesan diferentes etapas, como lo son: apresto laboral, colocación en un trabajo, y el acompañamiento al o la joven durante su año en la empresa.
En este proceso las y los jóvenes se enfrentan a capacitaciones que les orientan sobre la vida laboral, al mismo tiempo que lo ponen en práctica en una oportunidad real. Por lo mismo, sus respectivos egresos son hechos dignos de celebrar y poner en valor.
Así, quisimos premiar a los y las jóvenes por este logro. Para ello, nuestra Presidenta Trinidad Luengo, junto a la asesora laboral Carolaine Águila, les entregaron sus respectivos diplomas y un pequeño regalo como reconocimiento.
“Les invitamos a asumir ese desafío que es mantenernos en contacto, de hacer una red, de invitar, y porqué no, también quizá apoyar a jóvenes que se acerquen a nuestra Fundación.”
Trinidad Luengo, Presidente de Fundación Proyecto B
La actividad finalizó con abrazos y felicitaciones, aprovechando toda la rica comida que quedaba en la sala, e invitando a las y los asistentes a mantener el lazo que se generó ese día. Invitación que se enfocó en posibles proyectos para egresados y egresadas, así como también para orientar a otras personas que ingresen a la Fundación en el futuro y quieran seguir el camino de la reinserción.
