Cabildos Juveniles llevan voz de jóvenes privados de libertad a la Convención Constitucional

Todo un éxito fueron los Cabildos Juveniles impulsados por la Red de Cabildos Penitenciarios, organizados por Fundación Proyecto B en la Región Metropolitana y respaldados por Sename.

A la derecha, de pie delante de una pizarra en una sala de clases, con los brazos a la altura de su rostro, Omar Rivas, director técnico de Fundación Proyecto B modera un cabildo juvenil. 
Sentados, 4 jóvenes escuchan a Omar, mientras uno de ellos levanta la mano en señal de querer hablar.
Omar Rivas, director técnico de Fundación Proyecto B moderando un cabildo juvenil. Foto SENAME

El 20 de enero la Red de Cabildos Penitenciarios hizo la primera convocatoria de voluntarios y voluntarias para comenzar los cabildos en cárceles de adultos, y así permitir la participación de la población penitenciaria en el proceso constituyente.

Comenzados esos cabildos, el equipo de Proyecto B se preguntó por qué no sumar también a los y las jóvenes que cumplen condena en los centros de Sename. Así, se iniciaron una serie de conversaciones con la Red de Cabildos Penitenciarios y surgieron los #CabildosJuveniles.

Sin embargo, esta motivación no se quedó en la capital del país, sino que se expandió a otras regiones y se generaron alianzas entre Sename y diversas fundaciones, organizaciones y voluntarios, lo que resultó en 32 cabildos distribuidos en 11 regiones.

Aquí puedes leer sobre el proceso en Arica

En una sala de clases verde pistacho, cinco jóvenes residentes del Centro de Justicia Juvenil de Copiapó participan de un Cabildo Juvenil. Ellos están de espaldas a la cámara para proteger su identidad. Frente a ellos, de jeans y polera negra, una mujer modera el encuentro de espaldas a una pizarra en blanco.
Jóvenes del Centro de Justicia Juvenil de Copiapó participando de un Cabildo Juvenil.

Cabildos Juveniles en la RM

Mientras en el país se realizaban distintos encuentros, en la Región Metropolitana el equipo y parte del directorio de Fundación Proyecto B realizaron 9 cabildos, en los que participaron más de 74 jóvenes.

Los encuentros se hicieron en el Centro de Régimen Cerrado (CRC) Metropolitano Norte, CRC Santiago, Centro de Internación Provisoria (CIP) San Bernardo, CIP San Joaquín y en el Centro Semi Cerrado (CSC) Femenino Santiago.

Para Julio Cifuentes, director ejecutivo de Fundación Proyecto B, los cabildos juveniles fueron muy importantes porque “es un ejercicio de ciudadanía que permitió reconocer que los y las jóvenes privados de libertad son también sujetos de derechos, con ganas de participar en las decisiones del país, y que su situación transitoria de pérdida de libertad no significa que no puedan ejercer esos otros derechos”.

De frente a la cámara Julio Cifuentes, director ejecutivo de Fundación Proyecto B, observa atentamente a una joven residente del Centro Semi Cerrado Femenino Santiago que participa del Cabildo Juvenil. De fondo, dos mujeres escriben lo que la joven expresa en unos papelógrafos de papel kraft pegados en un muro.
Julio Cifuentes, director ejecutivo de Fundación Proyecto B, participa del cabildo juvenil realizado en el Centro Semi Cerrado Femenino Santiago. Foto SENAME.

Uno de los factores más relevantes de destacar según Julio fue que los y las jóvenes identificaron problemáticas y propuestas de solución ligadas a sus vivencias personales. “Muchos desconocemos esas vivencias y por eso es tan importante que éstas puedan llegar a ser conocidas por la Convención Constituyente y otras autoridades”, comentó.

En una sala pequeña del Centro Semi Cerrado Femenino Santiago que pertenece a Sename se realiza uno de los Cabildos Juveniles. En la muralla al fondo hay dos papelógrafos pegados donde han sido anotadas las opiniones de jóvenes que participaron del Cabildo Juvenil. De pié y de frente a la cámara, vistiendo polerón gris y jeans oscuros, Trinidad Luengo, presidenta de Fundación Proyecto B, se ríe mientras se toma el pelo. A su derecha, Julio Cifuentes, director ejecutivo de la fundación está sentado frente a una mesa donde hay tazas y galletas. De pie, y a la izquierda de Trinidad, está María José Espinosa, guía laboral de la fundación que viste un sweater negro. Pareciera ordenar algo en la silla que está entre la mesa y ella. A su izquierda y de azul oscuro, está sentada Josefa Giesen, miembro del directorio. Todos observan a una jóven residente del centro que participa del cabildo. Ella está hablando sentada y de espalda a la cámara para resguardar su identidad.
Parte del equipo y directorio de Fundación Proyecto B participando de un cabildo juvenil. Foto SENAME

María José Espinosa, guía laboral de Proyecto B considera importantes estos cabildos porque “implican una práctica de ciudadanía y refleja que forman parte de esta sociedad. Participar de estos encuentros es practicar su derecho de libre expresión y abrirse al proceso de diálogo y comunicación con otros, pero también con sus pares”.

Directo a la Convención Constitucional

La Red de Cabildos Penitenciarios enviará a la Convención las actas de todos los cabildos para que las experiencias, comentarios, ideas y sentires de diversos jóvenes de distintos lugares del país, sean parte de la discusión de una nueva constitución.

Además, elaborarán un informe con los resultados de los cabildos que se entregará de forma pública a la Convención para cerrar un proceso que sin duda pasará a la historia como la primera vez que se incluye en la creación de una nueva constitución a jóvenes y adultos privados de libertad.

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